Ayer llegaron a Luxor Javier, David y José Miguel, y hoy se han incorporado al yacimiento después del descanso de media mañana. Con David, José Miguel y Ana estuvimos planteando la excavación de esta campaña. Por un lado, David y Ana terminarán de excavar la cámara sepulcral del pozo que quedó inacabado el año pasado. Luego, se unirán a José Miguel, que habrá comenzado a excavar en el frente delante de la tumba-capilla de Djehuty y del Sector 10. En esta área esperamos sacar a la luz un frente de tumbas excavadas en la roca, datadas en la dinastía XII, pero nos llevará un tiempo alcanzar el nivel del suelo, pues tenemos casi cuatro metros de potencia de lascas de caliza y tierra. Este año, al ser menos excavadores y no todos quedándose toda la campaña, necesariamente tenemos que reducir los objetivos de excavación.
Como la excavación no va a comenzar hasta mañana, para mantener ocupados a los treinta trabajadores que tenemos contratados decidimos a primera hora desmantelar un muro de piedra que nosotros mismos construimos en las primeras campañas, en la parte más alta del yacimiento. Además de marcar el límite superior, pretendía proteger a la tumba-capilla de Djehuty de los posibles efectos de una gran lluvia torrencial. Ahora pretendemos, después de escanear los restos de la casa derruida, alcanzar la roca madre e ir excavando hasta llegar a la zona que ya excavamos años atrás por encima de la entrada a la tumba de Djehuty. Al retirar la acumulación de lascas de caliza y tierra reduciremos el peligro e caso de lluvias torrenciales.
Javier, a los pocos minutos de llegar al yacimiento, ya había bajado con Joan a la cámara sepulcral de Djehuty, para filmar las paredes y el techo sin la protección de metal. Hace casi diez años que la cámara de Djehuty o se veía vacía, sin la estructura de metal de protección. Había que aprovechar la ocasión para el tercer documental que tenemos en marcha para TVE. Por la tarde pudimos comprobar que tanto el escaneado, como la fotogrametría que hicimos ayer, han funcionado a la perfección. Ahora podemos decir que tenemos la tumba de Djehuty metida en el ordenador.