22 enero 2003

Trabajo de campo

A pesar de que hoy hemos encontrado media docena de conos funerarios con inscripción, una vasija de cerámica completa y varios fragmentos de cerámica pintada, nos ha dado la sensación de que ha sido una jornada menos frenética que las anteriores. Aún así, ha salido otro fragmento de la tablilla cuadriculada.

Por la mañana recibimos la visita de la profesora M. Betro, quien había dado clase a Andrés y luego a Ana en la Universidad de Pisa. Cuando le enseñamos la tablilla, exclamó que la campaña de este año habría merecido ya la pena sólo por encontrar este auténtico tesoro.

Alicia y Gemma, un día más, han estado revisando y clasificando el material que hemos ido sacando a la luz. Un trabajo duro y pesado, pero que hoy ha tenido la mejor de las recompensas. Entre una amasijo de vendas de lino que desenterramos hace dos días, han descubierto una inscripción en tinta roja, escrita en una columna de texto jeroglífico. Se puede leer perfectamente el nombre del rey Amenhotep II (sucesor de Tutmosis III), “el buen dios Aa-kheperu-ra”, y el texto termina con una referencia a su segundo año de reinado. Sin duda es una pieza de un gran valor histórico. La venda conserva incluso unos pequeños flecos atados en el lateral derecho. Una auténtica joya.

Trabajo de gabinete

Carlos y Juan han topografiado en la cámara más interna de la tumba de Djehuty. Para ello han tenido que diseñarse un trípode especial para la estación total, pues el que usan fuera no cabía debido a que los escombros llegan casi hasta el techo. Mañana empezarán con la de Hery.

Tomás, dentro de la jaima, ha estado redactando el informe geológico que incluiremos en la memoria de la segunda campaña, tanto en español como en inglés. Hoy se marcha de regreso a España vía Cairo. Su trabajo ha sido fundamental para saber realmente si las tumbas son seguras o no, y para entender cómo es la roca que constituye las paredes, el techo y el suelo, pues no hay que olvidar que las tumbas son, realmente, cuevas excavadas en la falda de una montaña rocosa. Ahora sabemos más a cerca de la colina de Dra Abu el-Naga y cómo la geología influye en la ubicación y decoración de las tumbas tebanas.

Vida cotidiana