Trabajo de campo
Hoy es la fiesta del Aaid, una de las celebraciones más importantes en el mundo árabe. Nosotros, un día más, lo dedicamos a adelantar trabajo.
Trabajo de gabinete
Hoy ha sido un día muy completo y lleno de múltiples actividades. Desde muy temprano, a eso de las seis de la mañana, Andrés y Ana se han ido a Karnak para hacer fotos. Cuentan que encontraron muchos turistas al llegar, pero que después se quedaron prácticamente solos y pudieron disfrutar de los magníficos relieves y de la grandiosidad del templo.
José Lull y Marga escogieron una ruta más abrupta y se fueron a subir al El-Qurn para, desde allí, llegar al Valle de los Reyes. Una vez allá, aprovecharon para visitar la tumba conocida como KV39. No está claro que rey se enterró allí. Una de las hipótesis, defendida por Winlock, sostiene que pertenece a Amenhotep I, aunque nuestro vecino Daniel Poltz piensa que es en Dra Abu El-Naga donde hay que buscar esta tumba.
José Manuel y Alicia han estado esta mañana en la excavación para continuar haciendo fotos, dibujar algunos planos y pensar, in situ, algunos detalles del trabajo. Cuando ya habían terminado se encontraron con un grupo de turistas españoles que les invitaron a subir a su autobús para hablar del Proyecto Djehuty.
En el Hotel Marsam, el resto del grupo trabajaba sin descanso. Montse, un día más, ha estado rellenando fichas de conservación, así como organizando los datos y las gráficas que proporcionan las distintas sondas y termohigrómetros que hay instalados en la tumba. Mientras, Carlos se dedicó a trabajar con la planimetría de la tumba en el ordenador.
Pero en la Harwa Suite, nombre que los italianos han puesto a una de las zonas de trabajo del Marsam, hay sitio para todos. Allí mismo, María José dibujaba piezas de cerámica y las cotejaba con las fotos digitales realizadas; y José Manuel trabajaba con la inscripción de una pieza de madera, que apareció hace unos días en la excavación y que conserva el nombre de Intef, nombre muy popular a finales de la dinastía XVII y comienzos de la XVIII.
Hoy no hemos comido al mediodía. Nuestro rais Ali nos invitó a comer en su casa, junto a su familia, para compartir el cordero que se sacrifica en la fiesta de Aaid. Y es que como ya tenemos la experiencia del año pasado, sabemos que comer en casa de Ali y Ala quiere decir no dejarse nada en el plato… Después aprovechamos para ver todos juntos el video que habíamos filmado el día de la boda de su hermano. La velada, que se prolongó hasta las once, resultó plenamente hogareña.