26 enero 2008

José Miguel se ha incorporado al trabajo en el yacimiento y ha retomado la excavación de la sala transversal de la tumba entre la de Djehuty y la de Hery. Las tres tumbas están comunicadas por el interior, al haberse roto en época antigua parte de las paredes que las separaban. Por esta razón, la sala transversal de la tumba de Djehuty comunica con la de la tumba vecina, y ésta a su vez con el pasillo de la tumba de Hery (que no tiene sala transversal). Mientras José Miguel supervisaba el trabajo de Hasán, Leandro realizaba una serie de “catas” en la pared de la sala transversal de Djehuty para entender las concreciones de barro y sucesión de corrientes de agua que fluyeron por esta parte de la tumba.

Cuando nos estábamos planteando dar por concluido el trabajo en la cata del patio de Djehuty, en el último momento decidimos profundizar un poco más al percibir que el suelo tenía unas hendiduras “sospechosas” que invitaban a ser investigadas. El tercer grupo de trabajadores se ha desplazado esta mañana a la zona por detrás de la fachada de Djehuty, para terminar el trabajo iniciado el año pasado y conocer como se construyó la superestructura que remataba la entrada a la parte interior del monumento funerario.

En la jaima, María José se ha reencontrado con la cerámica y ha comenzado revisando los dibujos realizados por Elena y las dataciones que ha asignado a varios de los conjuntos que ha estudiado. Junto a Ellas, Ana y Pía han estado fotografiando la cestería (cestas, bandejas, bolsos, sandalias, etc.), en la preparación de una publicación específica de este tipo de piezas, halladas en cantidad durante las seis primeras campañas del proyecto.