Informe campaña 2024
MISIÓN ESPAÑOLA EN DRA ABU EL-NAGA (TT 11 – 12)
23ª CAMPAÑA
28 de enero – 29 de febrero
2024
Director: José Manuel Galán
Director General de Antigüedades del Alto Egipto: Fathy Yasin
Director General de Antigüedades de la Orilla Oeste: Bahaa Abdel Gaber
Gestor de las misiones arqueológicas en la Orilla Oeste: Ramadan Ahmed Ali
Inspector del Servicio de Antigüedades: Ahmed Rifai
Inspector de Conservación: Mohamed Farraj
Capataz: Ali Farouk el-Qiftauy
Miembros del equipo:
- Abad, Emilio Arqueólogo
- Alonso, Pedro Gemólogo
- Arranz, Consuelo Gemóloga
- Bader, Bettina Ceramista
- Barahona, Zulema Ceramista
- Bardají, Teresa Geóloga
- Bollinger, Helga Documentación
- Bosch, Francisco Egiptólogo, arqueólogo
- Cuezva, Soledad Geóloga
- Forcadell, Ignacio Arquitecto
- González, María Ceramista
- Herrerín, Jesús Antropólogo físico
- Huertas, Laura Egiptóloga, arqueóloga
- Ikram, Salima Egiptóloga, arqueóloga
- Ivars, Juan Arquitecto
- Navarro, Miguel Ángel Restaurador
- Noria, Beatriz, Egiptóloga, arqueóloga
- Oliveira, Ana Arqueóloga
- Pérez-Juez, Amalia Arqueóloga
- Rodríguez, María Pía Restauradora
- Ruiz, Carmen Epigrafista
- Sánchez, Sergio Geólogo
- Sell, Juan Documentación
- Serrano, José Miguel Egiptólogo, epigrafista
- Trueba, Javier Fotógrafo y cámara
AGRADECIMIENTOS
El Consejo Supremo de Antigüedades de El Cairo ha sido de gran ayuda en todos los sentidos, y estamos muy agradecidos al Ministro de Turismo y Antigüedades, Dr. Ahmed Issa, al Viceministro de Antigüedades, Dr. Mostafa Wasiri, y a la Dra. Nashwa Gaber, Secretaria del Comité Permanente y Misiones Extranjeras. En Luxor, como todos los años, las autoridades responsables del Consejo Supremo de Antigüedades han sido de gran ayuda, en particular Fathy Yasin, Director General de Antigüedades en el Alto Egipto; Bahaa Abdel Gaber, Director del Departamento de Antigüedades en el West Bank; y a Ramadan Ahmed Ali, responsable de todas las misiones en el West Bank.
Esta temporada hemos tenido como inspector del Consejo Supremo de Antigüedades a Ahmed Rifai. Ha sido de lo más servicial y cooperativo. Se ha implicado mucho en la excavación y la conservación, y ha dado buenos consejos en muchas cuestiones relacionadas con la gestión del yacimiento y la organización del trabajo. Ha sido un honor y un placer trabajar con él, y le estamos muy agradecidos.
El rais Ali Farouk El-Quiftauy, como en años anteriores, ha desempeñado un papel importante en el éxito de nuestra obra. Organiza perfectamente a los obreros y tiene una gran sensibilidad para la arqueología, para la conservación de los objetos encontrados y de las estructuras desenterradas. Gracias a su implicación y energía hemos podido cumplir nuestros objetivos.
Hemos empleado a unos 70 trabajadores. Todos han trabajado muy duro y con gran esmero, y estamos más que satisfechos con su trabajo.
La campaña de trabajo de campo ha sido patrocinada por (1) el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, (2) Técnicas Reunidas, y (3) la Fundación Palarq. Instituciones que han posibilitado y colaborado en el desarrollo de la campaña han sido: (4) Leica Geosystems, (5) CESGA–Centro de Supercomputación de Galicia, (6) Reno Arqueología, (7) Fundación Montemadrid.
INTRODUCCIÓN
Dra Abu el-Naga es el nombre moderno de la colina que se eleva en la orilla occidental, en el extremo norte de la necrópolis asociada a la antigua ciudad de Tebas, que coincide con la actual Luxor. Una misión española lleva trabajando en la falda de la zona central de Dra Abu el-Naga desde enero de 2002, en el interior y los alrededores de las tumbas-capilla excavadas en la roca pertenecientes a Djehuty y a Hery (TT 11–12).
Hery vivió a principios de la Dinastía XVIII, bajo el reinado de Ahmose, y probablemente murió bajo el de su sucesor, el rey Amenhotep I. Podría haber estado relacionado con la familia real a través de su madre, Ahmes, a quien se hace referencia en el monumento de su hijo como “adorno(?) del rey”. El título administrativo de Hery mencionado en su tumba-capilla es “supervisor del granero doble de la madre del rey y esposa real Ahhotep”. Debió de ser un cargo relevante, ya que la reina Ahhotep gobernó de facto como rey durante unos veinte años, mientras su hijo Ahmose luchaba al norte y al sur. Las paredes interiores de su monumento funerario estaban totalmente decoradas en relieve de gran calidad, siendo una de las poquísimas tumbas-capilla decoradas que se conservan de este periodo de tiempo, ca. 1510 a. C.
Djehuty vivió unos cincuenta años más tarde, hacia el 1460 a. C. En la cima de su carrera administrativa como escriba, actuó como “supervisor del Tesoro” y “supervisor de los trabajos” realizados por los artesanos y trabajadores del metal para la reina Hatshepsut, que gobernó como rey durante unos veintidós años. Djehuty era también “supervisor del ganado de Amón”, cargo que lo asocia con el templo de Karnak, situado en la orilla opuesta, justo al otro lado del río Nilo. Las paredes de su tumba-capilla estaban decoradas en relieve, incluso la fachada y parte de la pared lateral izquierda del patio abierto. Su cámara funeraria también está íntegramente escrita con pasajes del “Libro de la Salida al Día”, popularmente conocido como el Libro de los Muertos.
DOCUMENTACIÓN TOPOGRÁFICA
Este año, por primera vez, la autorización de la policía llegó tres semanas más tarde de lo previsto. Esta circunstancia condicionó el plan de trabajo de la campaña. Teníamos previsto escanear todo el yacimiento para disponer de una imagen precisa y de la información topográfica que nos sirviera de base para el Sistema de Información Geográfica (SIG) que estamos desarrollando. Sin embargo, habiendo acumulado un retraso de tres semanas, decidimos posponer el escaneado general para la próxima campaña.
No obstante, escaneamos y realizamos una fotogrametría de la zona del yacimiento situada más arriba en la colina, que no había sido documentada todavía. Esta zona nunca estuvo ocupada por ninguna casa del pueblo moderno de Dra Abu el-Naga (demolido en 2006/07). Retiramos la capa superior de piedras sueltas, que no contenía ningún material, intentando llegar a la roca madre. Quedó al descubierto una capa de arena anaranjada que se apoyaba sobre el gebel, y ahora son más visibles las grandes rocas. En el lado noreste de lo que queda de la última casa moderna del pueblo, retiramos la basura que aún yacía en la superficie. Se encontraron tres conos funerarios y poco más.
Completamos la documentación de los restos de la casa situada más al norte del poblado moderno de Dra Abu el-Naga. La casa estaba construida sobre una amplia plataforma horizontal, que originalmente era el patio de cuatro tumbas excavadas en roca de la colina en el Reino Medio. Escaneamos las cuatro tumbas para elaborar un plano preciso de cada una de ellas.
Al menos una de ellos fue reutilizada en el Reino Nuevo, y se conserva un pequeño fragmento de su decoración pintada. Uno de nuestros restauradores consolidó el mortero de barro y el yeso, y limpió la pintura, confirmando su datación preliminar. La tumba se utilizó en época moderna para criar aves de corral, producir queso y otras actividades domésticas.
En una segunda tumba había un gran número de pequeños trozos de papel doblados e insertados en agujeros en el yeso que cubre las paredes de roca, la mayoría de los cuales contienen suras del Corán, utilizados para proporcionar protección a los moradores. Una tercera tumba se utilizó recientemente, entre otras cosas, para fabricar estatuas de madera. En el interior de esta última había una mesa de ofrendas y un cesto en una de sus salas, dejados allí por el equipo del ARCE cuando cerraron las entradas de estas tumbas. Al fondo de la tumba había un pequeño pasadizo hecho por ladrones, que conectaba con el extremo inferior de un pozo. Cuando subimos por el pozo, de unos cuatro metros de altura, accedimos a una amplia sala con cuatro pilares que era parte de una tumba excavada en la roca situada más arriba en la colina. En una de las esquinas hay un pasadizo descendente que conduce a una antecámara y, finalmente, a la cámara sepulcral. La planta de la tumba es característica de finales de la dinastía XVIII.
SECTOR 11
Las excavaciones en el Sector 11, frente al patio de la tumba-capilla de Djehuty (TT 11), continuaron esta campaña, centrándose en dos pozos funerarios, los números 38 y 39, que sólo se excavaron parcialmente el año pasado. El pozo 39 está asociado a una capilla de ofrendas construida en adobe (“Chapel no. 3”), y se encuentra ubicado frente a ella.
POZO 38
Está orientado de norte a sur. La boca mide 2,49 x 0,87 m, y tiene 4,20 m de profundidad. El brocal del pozo está en buen estado de conservación, sólo faltan algunos adobes en la parte sureste. En total se conservan 11 hileras de adobes. Miden aproximadamente 31 x 17 x 6/7 cm. En el suroeste, el brocal fue levantado por ladrones modernos. Consta de 6 filas de adobes, ligeramente más gruesos (9/10 cm) y sin mortero de unión.
A una profundidad de 4,10 m aparecieron grandes tablas de madera pertenecientes a un ataúd, así como huesos humanos y fragmentos grandes de lino. Según el análisis forense realizado, los huesos pertenecían a una mujer de unos 35-45 años. Debajo de una telas de lino se encontró un shabti de madera con inscripción, de finales de la dinastía XVII o principios de la XVIII. Perteneció a un dignatario, portavoz de Nekhen, llamado Teti-ankh. La cerámica hallada en el fondo del pozo data del mismo periodo que el shabti, y en su mayoría eran pequeñas botellas o vasos rojos. La única excepción fue la presencia de fragmentos de un plato del Reino Medio.
La cámara funeraria se encuentra en el extremo sur, a una profundidad de 2,90 m. Mide 2,62 x 1,84 m y 1,36 m de altura. Está descentrada, lo que indica que se abrió una vez terminado el pozo 37, situado al sureste. La cámara se encontró casi vacía, con algunos escombros en la entrada. La mayor parte de la cultura material recuperada del pozo data de la dinastía XVII/principios de la XVIII. Sin embargo, hay pruebas significativas de finales del Reino Medio.
El relleno superior de la cámara estaba formado por lascas de caliza de tamaño medio, piedras sueltas y adobes. Uno de ellos, de 27 x 13 x 11,5 cm, tiene la impresión del sello del “escriba Nebamun”. Al oeste del pozo también se encontró otro adobe en el que se menciona al mismo individuo, probablemente utilizado por los ladrones para recrecer el brocal original. A la entrada de la cámara se encontró un fragmento de badajo o palo rítmico de marfil de 11,2 x 3,3 x 0,8 cm, posiblemente del Reino Medio. Además, se hallaron varios fragmentos de un ataúd, así como dos fragmentos de un bastón de madera. Los fragmentos fueron restaurados y pegados, y medían 39,5 cm de longitud y 3 cm de diámetro. Este bastón es muy similar al hallado en el enterramiento de Iqer, que data del Reino Medio.
POZO 39
Se encuentra frente a la Capilla 3. Mide 2,40 x 1,26 m, y está orientado suroeste-noreste. Tiene un brocal de adobe recubierto de mortero, el pozo excavado en la roca y dos cámaras funerarias al fondo. Fue saqueado en la antigüedad, y se encontraron los restos de cuatro cuerpos momificados en el fondo del pozo, tirados fuera de la cámara sur. Había dos platos completos y muchos fragmentos de botellas y vasos rojos, todos fechados en la dinastía XVII/principios de la XVIII. También se encontraron pequeños fragmentos de un ataúd antropomorfo de madera pintada.
Durante esta campaña, nos centramos en la cámara sur. Mide 2,75 x 2,42 m y 1,25 m de altura. Tiene dos pequeños nichos, uno al este (0,72 x 0,72 cm) y otro al oeste (aún por excavar). El saqueo moderno documentado en los niveles superficiales del pozo está ausente en el interior de la cámara. En la estratigrafía del interior de la cámara se identificaron tres fases distintas de saqueo en la antigüedad.
El primer saqueo se produjo durante la transición entre la dinastía XVII y la XVIII. Tras el saqueo, el pozo permaneció abierto y la lluvia cayó en su interior, compactando una capa de arena. Posteriormente, tuvo lugar un segundo episodio de saqueo, no más tarde de principios de la dinastía XVIII, que dejó vendas de lino de momias por toda la cámara. Esta capa corresponde a la del fondo del pozo, donde se encontraron restos de cuatro cuerpos momificados. El tercer expolio documentado queda patente en un pequeño muro de adobe construido en el nivel superficial de la cámara. Se levantó con la intención de acceder a la cámara y evaluar si había algo de interés. Como la cámara ya había sido saqueada, se marcharon sin perturbarla más.
La cultura material del interior del pozo se halló en las capas asociadas a la primera y segunda fase de saqueo, y comprendía numerosos tejidos con diferentes flecos, huesos humanos y fragmentos de madera pintada de un ataúd de la dinastía XIII, con fondo negro y bandas de color verde y crema, esta última con una inscripción jeroglífica. En dos de los fragmentos podía leerse mAat xrw, “justificado de voz”, con el sufijo -t de femenino, lo que indica que el ataúd perteneció a una mujer. Tres grandes fragmentos de uno de los extremos del ataúd, con la representación de los pies, el pecho y parte de los brazos de una diosa, probablemente Isis o Neftis, se hallaron en la capa inferior, cementados con agua. Otro fragmento incluye la palabra sAt, “hija”, muy probablemente parte de un nombre de persona femenino.
Los niveles asociados al segundo episodio de saqueo arrojaron una red para colgar una vasija de cerámica, hecha con una cuerda, junto con numerosas flechas y tres bastones. Los fragmentos de cerámica abarcan desde finales de la dinastía XVII hasta principios de la XVIII. Sin embargo, la cerámica intacta o casi intacta pertenece a la primera mitad del Segundo Periodo Intermedio. Por consiguiente, parece que el enterramiento original del Pozo 39 se produjo en la primera mitad del Segundo Periodo Intermedio.
ARQUEO-GEOLOGÍA: ANÁLISIS DE LAS EVIDENCIAS DE LLUVIA
Tres geólogos han estado buscando testimonios de precipitaciones en distintas zonas del yacimiento. Ya analizaron la estratigrafía alrededor del jardín funerario del Reino Medio y en la cata que se abrió hace años en medio del patio de la tumba-capilla de Djehuty (TT 11). En esta campaña se centraron principalmente en analizar las evidencias alrededor de la capilla no. 3 y su pozo funerario, que datan del Segundo Periodo Intermedio. Nuestra pregunta de partida era si habría registros de lluvias que pudieran relacionarse con la llamada “Estela de la Tempestad” del rey Ahmose, primer rey de la Dinastía XVIII. Para poder abordar esta cuestión, es necesario poder deducir la intensidad de las lluvias y sus posibles consecuencias, y poder datarlas a través de la cultura material asociada y, eventualmente, a través del análisis de C14 de restos orgánicos directamente relacionados con el estrato de la evidencia de lluvia. Esta línea de investigación es muy prometedora y relevante, ya que los datos analizados pueden tener implicaciones históricas y sociales, y pueden arrojar luz sobre los cambios medioambientales en la región, en época antigua.
ESCANEADO DE LA CÁMARA SEPULCRAL DE HERY (TT 12)
Esta temporada hemos fabricado e instalado una escalera metálica en el pozo funerario de la tumba-capilla de Hery (TT 12), situado en la sala más interna del monumento. El pozo tiene 7,50 m de profundidad y se abren dos cámaras sepulcrales al fondo. La cámara sur estaba llena de huesos de animales quemados, mientras que la norte estaba llena casi hasta arriba de paquetes de lino, cuidadosamente atados, que contenían también huesos de animales. La cámara norte es bastante grande, de unos 3 x 6 m, y el número de momias de animales superaría fácilmente el centenar. Algunas de ellas están bien conservadas, mientras que otros paquetes están sueltos y los huesos son ahora visibles y están esparcidos por la superficie. Algunos paquetes contienen un solo animal, con su esqueleto todavía en posición anatómica, mientras que otros están formados por una mezcla arbitraria de huesos de varios individuos. La mayoría de los animales depositados aquí son ibis y halcones, pero también se han identificado otras rapaces. Probablemente las momias de animales fueron depositados aquí a mediados del siglo II a. C., según los grafitos demóticos escritos en las paredes de TT 12 y TT 11.
Teniendo a nuestra disposición en esta campaña el escáner láser Leica BLK 360, se decidió escanear la cámara, así como la cámara norte del pozo funerario de la vecina tumba -399- (2 x 3,5 m), con la que conecta a través de un agujero. El objetivo era documentar la situación actual de la cámara y el estado de conservación de las momias de animales, por si decidimos reanudar el análisis y el estudio de las momias la próxima campaña.
ANÁLISIS DE UN COLLAR DE PIEDRAS SEMIPRECIOSAS
En 2020, un par de metros al sureste de la capilla de ofrendas no. 3, se encontró un ataúd antropomorfo de una mujer joven colocado horizontalmente en el suelo. Estaba fijado en su posición por bloques de piedra caliza colocados a sus cuatro lados, y no se encontró ninguna cobertura especial sobre él. El ataúd mide 1,75 x 0,33 x 0,33 m y fue tallado a partir de un único tronco de sicomoro. La cara exterior del ataúd recibió una capa de enlucido. El cuerpo simula el de una momia, sin indicación de brazos ni piernas. Sólo la cabeza está tallada, de forma similar a los shabtis de madera contemporáneos.
La momia que descansa en su interior es la de una mujer de entre 14 y 17 años, de 1,55 m de altura. Contrariamente a lo que cabría esperar de un enterramiento en superficie, la mujer tenía un valioso conjunto de adornos personales. Cuatro collares estaban colocados sobre su pecho en un pequeño montón desordenado, antes de que la envolvieran con vendas de lino. Como el cuerpo reposaba de costado, los collares cayeron entre las costillas y el lado izquierdo del ataúd. La mayoría de las cuentas permanecían en su disposición original y seguían unidas por sus cordones, bien conservados y sólo rotos en algunos lugares. Los adornos personales caracterizan a esta joven como perteneciente la élite tebana. Aun así, fue colocada en el suelo, sin protección alguna. Los adornos personales intactos parecen indicar que el ataúd no fue abandonado por antiguos ladrones, sino que se dejó intencionadamente en el suelo.
Tres de los collares son de cuentas de fayenza. El cuarto está compuesto por 74 cuentas de diversas formas, entre ellas dos escarabeos, un halcón/Horus y cinco amuletos de fayenza en miniatura.
El collar se encuentra ahora actualmente en el Museo de Luxor, expuesto junto con un número significativo de objetos hallados durante la excavación en las tumbas-capilla de Djehuty y Hery y sus alrededores. En esta campaña, dos expertos gemólogos de el Monte de Madrid llevaron a cabo un análisis exhaustivo de las piezas del collar. Sus conclusiones son las siguientes.
Las gemas analizadas se encuentran en un excelente estado de conservación. El grado de acabado es notable, teniendo en cuenta la dureza de las piezas y los instrumentos que pudieron utilizarse para su lapidado. Un ejemplo de ello es la magnífica simetría de algunas de las muestras esféricas. El diámetro del taladro utilizado varía en función de la dureza de las cuentas de piedra, oscilando entre 1,5 mm para las más duras (cuarzo y ágata) y 2,7 mm para las más blandas (esteatita). También se observa que, en varias piezas, la sección de la perforación es diferente en cada extremo de la cuenta debido a la mayor abrasión al principio de la perforación. Debido a la morfología de las muestras (cuentas con poca o ninguna transparencia y con taladros de mucha sección) no se ha podido determinar ningún índice de refracción.
El estudio se centró principalmente en las ocho cuentas de color azul, que se pensó que podrían ser de vidrio, la número 2, 24, 29, 30, 49, 54, 57 y 74. La reacción a la luz ultravioleta era de especial interés, debido a su comportamiento “errático” como material artificial, por analogía con los vidrios modernos. En todos los casos resultaron ser inertes, tanto a la luz ultravioleta corta (254 nm) como a la luz ultravioleta larga (365 nm). Como análisis complementario, se utilizó una lupa de 10 aumentos y un método de “pulido rápido”, método especialmente indicado para materiales muy rugosos, poco pulidos y transparentes. El pulido rápido consiste en añadir una gota de aceite de cedro a la superficie de la muestra, ya que el aceite de cedro tiene un índice de refracción muy similar al del vidrio. Gracias al aceite de cedro, el interior de la muestra se puede observar con mayor claridad.
Tras los análisis efectuados, se puede determinar que las ocho cuentas azules del collar corresponden a vidrio artificial, basándose en lo siguiente:
– Presencia de un gran número de burbujas esféricas, indicativas de un proceso de fundición muy primitivo.
– Tipo de fractura concoidea característica de los vidrios.
– Superficie rugosa muy poco pulida y rellena de impurezas, debido a que las burbujas cercanas a la superficie quedaron al descubierto en el proceso lapidación.
Identificación de las cuentas del collar hallado en Dra Abu el-Naga Norte:
1 Ágata cornalina en forma de Horus 2 Cuenta cabujón de vidrio artificial 3 Cuenta esférica de cuarzo amatista 4 Cuenta tonel de ágata cornalina 5 Cuenta esférica de cuarzo amatista 6 Cuenta tonel de ágata cornalina 7 Cuenta esférica de cuarzo amatista 8 Cuenta esférica de turquesa 9 Escarabeo de esteatita 10 Cuenta esférica de cuarzo amatista 11 Cuenta esférica de ágata cornalina 12 Fayenza en forma de Horus 13 Cuenta tonel de ágata cornalina 14 Cuenta esférica de cuarzo amatista 15 Cuenta tonel de ágata cornalina 16 Cuenta ovalada de cuarzo amatista 17 Cuenta tonel de cuarzo amatista 18 Cuenta esférica de ágata cornalina 19 Cuenta tonel de cuarzo amatista 20 Cuenta esférica de cuarzo Amatista 21 Cuenta esférica de ágata cornalina 22 Cuenta esférica de cuarzo amatista 23 Cuenta tonel de cuarzo amatista 24 Cuenta esférica de vidrio artificial 25 Cuenta tonel de ágata cornalina 26 Cuenta de fayenza 27 Cuenta esférica de cuarzo amatista 28 Cuenta tonel de cuarzo amatista 29 Cuenta esférica de vidrio artificial 30 Vidrio artificial fragmentado 31 Cuenta esférica de cuarzo amatista 32 Cuenta tonel de ágata cornalina 33 Cuenta esférica de ágata cornalina 34 Cuenta tonel de ágata cornalina 35 Cuenta esférica de granate 36 Cuenta tonel de ágata cornalina 37 Cuenta oval de granate | 38 Cuenta tonel de granate 39 Cuenta esférica de cuarzo amatista 40 Cuenta oval de ágata cornalina 41 Cuenta tonel de cuarzo amatista 42 Cuenta de fayenza 43 Cuenta esférica de cuarzo amatista 44 Cuenta tonel de cuarzo amatista 45 Cuenta esférica de ágata cornalina 46 Cuenta tonel de cuarzo amatista 47 Cuenta esférica de ágata cornalina 48 Cuenta esférica de cuarzo amatista 49 Cuenta esférica de vidrio artificial 50 Cuenta tonel de ágata cornalina 51 Cuenta esférica de ágata Cornalina 52 Cuenta tonel de ágata cornalina 53 Cuenta esférica de cuarzo amatista 54 Cuenta oval de vidrio artificial 55 Cuenta esférica de granate 56 Cuenta tonel de cuarzo amatista 57 Cuenta esférica de vidrio artificial 58 Cuenta tonel de ágata cornalina 59 Cuenta tonel de cuarzo amatista 60 Cuenta tonel de ágata cornalina 61 Cuenta esférica de cuarzo amatista 62 Cuenta tonel de ágata cornalina 63 Cuenta de fayenza 64 Cuenta ovalada de turquesa 65 Cuenta tonel de ágata cornalina 66 Cuenta esférica de cuarzo amatista 67 Escarabeo de ágata cornalina 68 Cuenta esférica de cuarzo amatista 69 Cuenta ovalada de cuarzo amatista 70 Cuenta tonel de ágata cornalina 71 Cuenta ovalada de cuarzo amatista 72 Cuenta de fayenza con forma de Horus 73 Cuenta ovalada de cuarzo amatista 74 Cuenta cabujón de vidrio artificial |
EXAMEN RADIOGRÁFICO DE MOMIAS HUMANAS Y ANIMALES
Varias momias humanas y de animales halladas en los últimos años por la misión española que trabajaba en las tumbas de Djehuty y Hery (TT 11-12) y sus alrededores, se encuentran en la actualidad guardadas en el almacén del Servicio de Antigüedades junto a “Carter–House”. Durante esta campaña, han sido sometidas a un examen con rayos-x.
Una de ellas era una mujer de la dinastía XXI, de entorno a 30 años de edad. Otras de las personas momificadas fue una niña nubia, momificada muy cuidadosamente. Sus ojos estaban llenos de lino. Probablemente data también de la dinastía XXI. Finalmente se estudió la momia de un mono datado en el Reino Nuevo, extraordinariamente momificado, incluso excerebrado. El tórax está cuidadosamente relleno de lino. Se encontró junto al pozo funerario ubicado a la entrada de la tumba-capilla -399-, entre Djehuty y Hery (TT 11-12).
EPIGRAFÍA
La documentación epigráfica ha continuado en la tumba-capilla de Djehuty. Las paredes de la sala transversal y de la zona central del corredor están muy erosionadas y es necesaria la luz rasante para ver las figuras y textos en relieve. Sin embargo, las inscripciones y escenas talladas en la fachada y en una de las paredes laterales del patio están bien conservadas, y se terminaron los dibujos, que luego han sido colacionados. La documentación epigráfica estará terminada a finales de la próxima campaña.
DOCUMENTACIÓN TOPOGRÁFICA
SECTOR 11
Pozo 38
Pozo 39