La mañana de este viernes ha dado mucho de sí, como las de todos los viernes. Un grupo se ha ido a visitar el templo de Qasr el-Aguz, un templo de época ptolemaica y que ha sido recientemente restaurado y abierto al público. Ahora se pueden apreciar la policromía original de las escenas en relieve. De regreso, se detuvieron un buen rato en el templo de Millones de Años de Ramsés III, Medinet Habu. Además de admirar las escenas de la guerra contra “los pueblos del mar”, entre los que se encontraban los filisteos, se acercaron a la casa que, dentro del recinto sagrado, se hizo construir Butehamón. Este escriba de la necrópolis vivió hacia el final de la dinastía XX, en torno al 1090 a. C., y fue el encargado de inspeccionar las tumbas de los reyes y altos dignatarios para comprobar si habían sido saqueadas o no. Algunos egiptólogos piensan y argumentan que acabó siendo él el principal saqueador de tumbas para beneficio de las arcas del monarca de entonces, Ramsés XI.
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Imagen de una de las estancias del templo de Qasr el - Aguz.
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Templo de Ramsés III en Medinet Habu.
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Restos de la casa de Djehuty-mose y su hijo Butehamón dentro del recinto sagrado del templo.
Angie y Lucía, asistidas por Elena, nos han preparado hoy una comida española para chuparse los dedos. Casi da corte hablar del tema en la web. De plato fuerte una tortilla de patata con cebolla cuajada ala perfección, acompañada por un pato de queso de cabra de león y otro de cabrales. Pero todavía mejor estaba el salmorejo, con huevo rallado y jamón picado. No se me puede olvidar mencionar que Carlos nos preparó de aperitivo unos capellanes a la brasa, otro clásico ya del menú gourmet del proyecto.
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Miguel Ángel se desmarcó y se fue en plan solitario a ver el Rameseum.
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Pía pintando acuarelas en la terraza del Marsam.
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Vista desde la terraza del Marsam, con coloso incluido.
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Angie y Lucía en la cocina del Marsam.
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Dr. Fathy y Nacho en el hospital de Qena.
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Nacho y la abuela Cobra, reencuentro diez años después en plan “quién sabe dónde”.
Nacho, tan original como siempre, decidió localizar por Google Earth e ir a buscar a una familia en el pueblo de Qena, con la que compartió unos días hace ya diez años. Le acompañaron en el coche Gema y Kamal. Tras varias aventuras, consiguieron llegar a su destino y se encontraron con el Dr. Fathy en plena faena en el hospital local. El reencuentro fue muy emotivo, sobre todo con la abuela, llamada Cobra, que a pesar de ser centenaria se acordaba perfectamente de Nacho. Como para olvidarse.