Hoy ha sido un día un poco complicadillo de burocracia y relaciones públicas con las autoridades del Servicio de Antigüedades. Supuestamente íbamos a inscribir en el Register Book algunos de los objetos que llevamos días atrás al almacén, como paso previo para tramitar su traslado al museo. Tres horas después nos volvíamos al yacimiento con las manos vacías, tras presenciar varias discusiones acaloradas entre los empleados. Mañana lo volveremos a intentar, espero que con más éxito. Mientras ocurría todo esto en los despachos, en el cuarto reservado para la misión española Pía ha terminado de restaurar el ataúd de Neb y Pito ha estado sacando fotos de detalles y del ataúd entero, para lo que ha tenido que subirse a lo alto de una de las estanterías.
-
Vista del Sector 10 Sur al final de la jornada.
-
Sale a la luz la entrada a una tumba nueva en el Sector 10 Sur.
-
Shabti hallado en el Sector 10 Sur.
La excavación en el Sector 10 Norte parece que podrá terminarse en esta campaña, alcanzando el nivel de la calle que conduce a las tumbas del segundo “piso” y que pasa por detrás de la fachada de Djehuty. José Miguel ya ha terminado de excavar las estructuras de adobe y a última hora de la mañana hemos restaurado la bóveda de la fachada de la tumba de Djehuty-nefer para poder excavar en su interior sin correr peligro de que se nos caiga. También al final de la mañana, en el Sector 10 Sur salió a la luz la entrada a una nueva tumba, probablemente de la dinastía XVII o incluso anterior.
-
José Miguel consulta con Zulema la cerámica hallada en su zona de excavación.
-
Sacando una gran piedra de una de las estructuras de adobe.
-
Depósito de conos de Djehuty ya estudiados e inventariados.
-
Lucía revisando el texto del techo de la cámara sepulcral de Djehuty
-
Mientras Pía termina de retocar la restauración de Neb, Pito saca fotos de detalle.
-
Pito se las apaña para sacar fotos del ataúd dentro del almacén del Servicio de Antigüedades.
Lucía ha estado bajando todos los días al menos un par de horas a la cámara sepulcral de Djehuty, para analizar en detalle el texto del Libro de los Muertos escrito sobre sus paredes y techo. Ahora está con los capítulos del techo, que para verlos bien hay que retorcerse y la tortículis ya debe estar al caer. La dificultad para leerlo da una idea de las penurias por las que tuvo que pasar el escriba para escribir con buena letra en el techo el texto que estaría copiando probablemente de un papiro. Arriba, en el pasillo y en la sala más interna de la tumba-capilla de Djehuty Nieves, Ahmed, Mohamed y Saadi siguen limpiando la superficie de las paredes, reponiendo bloques, cerrando grietas y consolidando pigmentos.