En plena cuenta atrás para la apertura, estamos colocando en su sitio fragmentos de la pared del pasillo de la tumba de Djehuty. Se desprendieron de forma natural y los hallamos en la excavación del exterior, en lugares bien dispares y alejados de la tumba. Tienen la peculiaridad de que la mayoría fueron intencionadamente ennegrecidos sólo por la parte que quedaría visible una vez empotrado el bloque en su sitio. Probablemente pretendieran con ello darle al “añadido” un carácter sagrado que el resto del edificio ya tenía por ser parte intrínseca de una capilla.
Junto a las restauradoras, Carmen dibuja las escenas en relieve e inscripciones que decoran as paredes internas de la tumba de Djehuty. La primera versión del dibujo la imprimimos en papel de tamaño A3, para revisar el dibujo y hacer correcciones que luego revisará Carmen e introducirá e el dibujo si es que está de acuerdo. Para las correcciones conviene, en las zonas más erosionadas, apagar la luz de la tumba y jugar con una linterna para ver el relieve con sombras distintas. El objetivo es que el dibujo epigráfico muestre detalles que a simple vista o en una fotografía no se aprecien.
Hoy, después de varias discusiones con el rais Ali, hemos decidido reforzar la parte de arriba de la fachada de la tumba de Hery. El objetivo no sólo es evitar que puedan caer pequeñas piedras a los futuros visitantes de la tumba, sino también conservar los restos de la superestructura que en su día tuvo por encima de la fachada. Se conservan algunos adobes alineados en paralelo con la fachada y, detrás de ellos, unos bloques de piedra caliza. Uno de los laterales conserva parte de una pared recubierta con una capa de mortero enlucido, describiendo un plano con una inclinación similar a la delas pirámides de los reyes de la dinastía 17. La combinación de estos elementos, junto con la forma de la roca de colina aquí, parecen indicar que Hery pudo tener una pequeña pirámide coronando su tumba. Si bien nuestra intervención va a tapar en parte estos elementos por otro lado ayudará a conservarlos, pues de otro modo acabarían desprendiéndose del terreno y deshaciéndose o cayendo al suelo.