29 enero 2019

Forrest Gump dijo, “la vida es como una caja de bombones, uno nunca sabe lo que le va a tocar.” Otra frase mítica podría ser, “la vida es un puzzle gigante en el que, de vez en cuando, piezas separadas y perdidas se encuentran y encajan”. Ayer, Carlos encontró un trozo de una “paddle-doll”, es decir, de una muñequita de madera que se incluía en los ajuares funerarios supuestamente porque se asociaba a la fertilidad y, por tanto, al (re)nacimiento que tanto deseaba el difunto. Pues bien, ese trocito resultó encajar perfectamente con otro que encontró el año pasado a la entrada de la tumba, a cinco metros de distancia y a un metro de diferencia de altura. Y hoy, José Miguel, excavando por detrás de la capilla del hijo del rey Intefmose, ha hallado un mango de madera tallada que ha resultado ser parte de un instrumento de madera en forma de mano y con la cabecita de Hathor en la muñeca que encontramos en 2013. ¡Hace cinco años! Se denominan “clappers” y se utilizaban por bailarinas y cantantes para marcar el ritmo. Se siente una emoción especial cuando se juntan dos piezas después de tanto tiempo separadas.

Salima y Cisco están ya a pleno rendimiento, excavando en la tumba paralela a la de Hery. Ahora están en la zona hasta donde conducen los graffiti demóticos que mencionan las “capillas de los dioses”. Además de encontrar material contemporáneo a los grafiti, del siglo II a. C., ya han encontrado algunos fragmentos más de la estatua del supervisor de los tejedores, Ay.

En el patio donde se ubica el jardín tenemos que ir necesariamente muy lentos porque es importante documentarlo todo minuciosamente. A medida que la excavación va avanzando, vamos “comiéndonos” las evidencias de lluvias que tanto nos interesan, por lo que es importante ir paso a paso, pensándolo todo muy bien para que luego no nos arrepintamos de nada. Más vale pecar de prudentes y obsesivos que de acelerados e incautos. El registro de la estratigrafía es más valiosa para un arqueólogo e historiador que casi cualquier objeto que puedas hallar en el camino.