José Miguel alterna el control de la excavación en el pozo de la sala trasversal con el estudio epigráfico de las escenas del ritual de la “Apertura de la Boca”, representadas en una de las paredes del pasillo de la tumba de Djehuty. Poco a poco va colocando los fragmentos hallados en la excavación del exterior años atrás y va reconstruyendo las escenas dañadas. Djehuty es probablemente uno de los cortesanos de la antigua Tebas que decide narrar los distintos momentos del ritual mediante una sucesión de viñetas que combinan texto e imagen.
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Amanecer desde el patio del Marsam.
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José Miguel coloca un fragmento hallado en el exterior en su sitio del pasillo de Djehuty.
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Detalle de la escena del ritual de la Apertura de la Boca, representado en el pasillo de Djehuty. Detalle de la escena del ritual de la Apertura de la Boca, representado en el pasillo de Djehuty.
Nieves y Pía alternan varios trabajos de restauración para hacer su trabajo más ameno. Pía ha dejado hoy el ataúd de Iqer y Nieves ha hecho un descanso en su trabajo cara a la pared para trabajar juntas en la restauración de un fragmento de pintura procedente de la cámara pintada. El fragmento es significativo porque se trata del único retrato intacto que tenemos de Djehuty.
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Nieves restaura una de las paredes de la capilla de Djehuty.
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Nieves y Pía trabajan con un fragmento de pintura de la cámara sepulcral de Djehuty.
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Kamal retira lascas de piedra dentro de la cámara pintada.
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Fumar perjudica seriamente la salud...pero ayuda a sobrellevar el trabajo.
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El Rameseum al anochecer.
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Las garzas amenizan los campos de cultivo detrás del Marsam.
En la cámara pintada de Djehuty seguimos recogiendo fragmentos de estuco con escritura. El puzzle que tenemos por delante va a ser de los dificiles… Mientras tanto, en el otro pozo de Djehuty, el que se abre junto a la fachada, Gemma y sus muchachos han superado ya los nueve metros de profundidad. La cámara sepulcral ya se puede ver bien. Debe medir unos tres metros de largo por seis metros de ancho, y está llena de escombros casi hasta el techo. Para seguir trabajando necesitamos conseguir una escalera más larga y más segura. Alí se encargará de mover sus contactos en El Cairo mañana para ver si nos pueden hacer llegar una hasta Luxor.