Trabajo de campo
Hoy los obreros nos han amenizado el trabajo con cánticos y Mahmoud Broston se ha arrancado con sus bailes, ya clásicos en Djehuty. Oscar ha organizado el desmantelamiento del muro de adobe moderno que separaba parte del patio de Hery de la tumba intermedia. Ahora puede verse bien cómo la estructura antigua de adobe cruza de un patio a otro, superponiéndose a ambos. En a zona de Gemma y Marga han seguido saliendo fragmentos de relieve y, con ellos, un fragmento de cartonaje en el que se representa a una de las divinidades encargadas de custodiar las puertas del camino hacia el Más Allá. En este caso se trata de Neb-pehty, “El señor de la fuerza”, que posee cabeza de león y empuña un afilado cuchillo.
Dentro de la jaima, Montse se ha encargado de limpiar, estirar y guardar con cuidado algunas telas de lino, que formarán parte de la “linoteca” del yacimiento. A su lado, María José dibuja cerámica y Ahmed y Mohamed la ayudan uniendo y pegando fragmentos. Y un poquito más allá, el niño del té, que también se llama Mohamed (que es como José aquí en Egipto), montaba y desmontaba el “Bionicle” que le ha traído de regalo la “moudira”. Está encantado con su pequeño monstruo intergaláctico.
Trabajo de gabinete
“La tabla del maestro” ha mantenido ocupado a Carlos Spottorno toda la mañana. En el vestíbulo de la tumba de Djehuty ha montado un estudio de fotografía y un sistema para llevar la luz del sol dentro de la tumba mediante reflectores, consiguiendo así capturar el color natural del estucado amarillento de la tabla. Mañana seguirá con ella, sacando detalles con un macro. Entre otros, la huella dactilar del maestro, o del alumno.
Ana y Luis han estado también sacando fotos, pero ellos a las cianobacterias y su efecto sobre los relieves de la sala transversal de la tumba de Djehuty.