23 enero 2007

Ayer por la noche llegaron a Luxor María José y José Miguel y esta mañana se han incorporado a la excavación. José Miguel se encargará de continuar la excavación de la capilla de Djehuty, pues él fue quien comenzó este trabajo el año pasado. Andrés retomará ahora el trabajo con los fragmentos de relieve hallados en la excavación del exterior. Al final de la jornada, José Miguel y Yuma habían rebajado casi veinte centímetros la tierra que rellena la capilla, y Andrés, por su parte, había hallado y recolocado un fragmento de la estela autobiográfica de Djehuty.

María José se ha puesto rápidamente manos a la obra con la cerámica. Ha comenzado por estudiar y dibujar, ayudada por Elena, algunas de las vasijas del depósito que estamos excavando en el patio de Djehuty.

El depósito funerario del patio de Djehuty sigue ofreciéndonos estupendos ramilletes de flores, que Pía consigue levantar sin que se fracturen, después de que Juan los fotografíe en detalle.

La excavación por encima de la fachada de las tumbas ha comenzado hoy a dar frutos. En primer lugar, ya se puede apreciar claramente que los muros de adobe forman parte del patio de entrada a una tumba excavada en la colina justo por encima de las tumbas de Djehuty, Hery y la intermedia. Dentro del área de este nuevo patio ha salido a la luz una pequeña mesa de ofrendas de arenisca y, en la esquina opuesta, una carita que perteneció en su día a la tapa de un vaso canopo, junto con fragmentos de cartonaje pintado y cerámica decorada.

Curro y Parra siguen trabajando con los fragmentos de ataúd pintado hallados en pasadas campañas, clasificando y fotografiando cada fragmento.

A la una de la tarde el trabajo de excavación termina y la mayoría de los trabajadores se marchan. Algunos se quedan con nosotros hasta las tres para realizar tareas concretas. Hoy, el rais Alí, Sayed y Yuma han estado retocando los adobes modernos que colocamos el año pasado sobre los muros laterales del patio de Djehuty, para que se diferencien claramente de los adobes antiguos que todavía se conservan «in situ».