21 enero 2015

Hoy hemos alcanzado 34 grados en el yacimiento, un calor algo excesivo para estar todavía en enero. La primera mitad de la mañana nos la hemos pasado Salima y yo inspeccionando la tumba de la dinastía XI que descubrimos al final de la campaña pasada. Una tumba muy bien tallada en la roca, de grandes dimensiones, y que fue luego reutilizada en la dinastía XVII para enterrar docenas de individuos. Llegamos a contabilizar hasta casi un centenar, entre los que había un alto porcentaje de niños. En la superficie abunda, además de huesos y una enorme cantidad de lino, mucha cerámica en bastante buen estado, restos de cestas y cuerdas. Da la impresión que la mayoría de los cuerpos fueron depositados sin ataúd, simplemente envueltos en lino y como mucho dentro de una estera hecha de cañas. Parte del pasillo de entrada está lleno de escombro hasta casi el techo. El pasillo hace un quiebro y comienza a descender hacia la cámara sepulcral, atravesando una pequeña antecámara. En el tramo final del pasillo descendente las sales en las paredes adquieren tal tamaño que al apoyarte te pinchan. La cámara sepulcral es de pequeño tamaño comparado con el resto del monumento, y se encuentra llena de grandes bloques de piedra. Estuvimos tres horas bajo tierra, sudamos la gota gorda y acabamos molidos. Mañana creo que me tocará bajar con Pito para fotografiar al detalle toda la tumba.

Megan continúa su estudio de las aves momificadas y depositadas en la cámara sepulcral de Hery. Muchos de los paquetes de lino contienen una informe amalgama de huesos ennegrecidos por la resina caliente en la que fueron introducidos los animales. No muy lejos de su “laboratorio”, Cisco sigue excavando la galería que se abre en mitad del suelo del pasillo de la tumba entre la de Djehuty y la de Hery.

En el Sector 10 Sur están saliendo a la luz unos adobes que, al principio, parecía que podrían ser la esquina de un pozo, pero ahora está claro que no es así, que son parte de una estructura arquitectónica distinta, tal vez parte de la fachada de una tumba, o una capilla. Junto a éstos, aparece un depósito de cerámica similar al que descubrimos hace un par de años, pero probablemente menos numeroso. En el Sector Norte del yacimiento las estructuras de adobe crecen y se complican, lo que hace más atractiva la zona y el trabajo.