19 enero 2025

Por fin, hoy hemos comenzado a excavar. Laura ha retomado la excavación del pozo 39, ubicado justo delante de una capilla de ofrendas construida en adobe. En este caso, hay un murete de adobe que sale de ambos lados de la capilla y rodea el pozo, marcando así la zona especialmente dedicada al culto del difunto que fue enterrado en el pozo. El pozo los excava Laura junto con Salem y Hussein. Ha sido robado en época antigua y en la cámara sepulcral del extremo este por ahora se han encontrado tan solo fragmentos de ataúd pintado y restos humanos desmembrados. Pero queda por terminar de excavar esta cámara y el interior de la cámara oeste, que es la principal, pues es la que queda justo debajo de la capilla. De todas maneras, la excavación de este pozo tiene su interés porque conserva bien las huellas de lluvias durante el Segundo Periodo Intermedio y el rastreo de la actuación de ladrones de tumbas en la antigüedad.

Hemos retomado también la excavación arriba de la colina, en la zona que excavaba el año pasado Emilio. Este año trabajarán aquí los arqueólogos Miguel Ángel y David, dos de los “fichajes” nuevos de este año. El terreno tiene en superficie muchas piedras sueltas y zonas de tierra gris, consecuencia de haber depositado allí mucha paja para hacerle una especie de pesebre para algún burro. El material que se encuentra, como era de esperar, es todo moderno, de las casas que estuvieron allí en pie hasta 2006. Mucho recipiente de cristal roto, mucho plástico y algún souvenir de inspirado en algún objeto antiguo. Habrá que tener paciencia hasta llegar a los niveles antiguos.

Hoy ha sido el cumpleaños de José Miguel, ayer el de Jesús y un par de días antes el de Zulema. Así que hoy los hemos celebrado los tres juntos con una estupenda tarta que nos ha hecho nuestro cocinero Tayib con ayuda de Karim. La verdad es que en la nueva casa estamos super a gusto. Es bonita, bastante nueva y está rodeada de campos de verde intenso, y detrás se ve todo el frente de la montaña tebana que se levanta paralela al rio Nilo. Pero lo mejor de todo es que Tayib, Karim y los tres Mohamed consiguen hacernos sentir casi como en casa.