Hoy, por fin, hemos comenzado la excavación. Hemos formado seis equipos de trabajadores, con unos cuarenta trabajadores. Angie y David han comenzado a excavar cada uno un pozo de los que están en torno al jardín. Aunque supuestamente los pozos fueron construidos en la dinastía XVII, es decir, en el año 1600 a. C. aproximadamente, el relleno incluye materiales de distintas épocas, pues ambos han sido saqueados en época antigua y rellenados al menos una vez, si no más, y en ese relleno se colaron objetos de otros equipamientos funerarios también saqueados y esparcidos por esta zona de la necrópolis. En el pozo que excava Angie, junto con Hussein y Hagag, han salido hoy varios fragmentos de shabtis de Tutuya, mayordomo veterano y supervisor del ganado de Amón a comienzos del reinado de Ramsés II. La mayoría son de barro cocido y policromado, pero hoy hemos encontrado uno de madera, de gran tamaño, pintado y con un texto escrito en registros horizontales, y restos de pan de oro. Un ejemplar verdaderamente excepcional. De este personaje ya tenemos más de ciento sesenta ejemplares. Además, ha salido un fragmento considerable de un ataúd de la dinastía XXI, de la misma pieza que el fragmento que encontró David en esta zona hace dos años. Y, además de un amuleto de fayenza con el Ojo de Horus, fueron saliendo a la luz guirnaldas de hojas de persea y unas flores en un estado de conservación inmejorable.
Por otro lado, José Miguel y Laura han retomado una zona que excavó Carlos el año pasado, junto a la capilla de adobe de la dinastía XVII y los shabtis de madera que descubrió Laura (uno de ellos con el nombre de Ahmose-Sapair). Habiendo descendido a penas veinte centímetros, junto a un conjunto de maderas y vasijas rotas, arrojadas allí por los saqueadores, salió a la luz un par de sandalias de cuero en magnífico estado de conservación. Son de gran calidad y pueden datarse en la dinastía XVII o a comienzos de la dinastía XVIII. Por su tamaño, el par perteneció a un niño o niña, se hallaron pegadas una a otra. Un hallazgo excepcional, sobre todo teniendo en cuenta que en unos días se unirá al equipo el mayor especialista de sandalias y de cueros, el holandés André Veldmeijer, que venía a estudiar las sandalias que hallamos la campaña pasada, ¡esto sí que es coincidencia!, ahora tendrá algo más trabajo.