14 enero 2009

Hoy nos hemos levantado todos a las 6, para desayunar media hora después y a las 7 ya en el yacimiento. Con seis trabajadores de los de siempre comenzamos poco a poco a sacar todo el material de las tumbas y a montar las jaimas de restauración, cerámica y demás. En el año transcurrido con las tumbas cerradas se posa un polvillo muy fino sobre los objetos guardados dentro, por lo que sacamos todo para limpiarlo bien, incluso sacudimos las esteras que cubren el suelo. Conectamos la luz a la caseta de los gafires y revisamos todo el equipo de excavación para dejarlo listo para mañana.

Durante un buen rato estuvimos dándole vueltas a cómo excavar la zona de Iqer, es decir, cómo progresar dentro de lo que parece ser una tumba de la dinastía XI sin hacer peligrar el muro de adobe de Djehuty que atraviesa perpendicularmente nuestra línea de actuación, un metro más arriba, y que si excaváramos donde necesitamos descalzaríamos buena parte de él. A última hora de la mañana hemos recibido la visita sorpresa de Guillemette Andreu, jefa del departamento de antiguo Egipto del Museo del Louvre, que estaba muy interesada en conocer nuestras tumbas en directo, sobre todo los relieves de Hery.