05 Febrero 2020

La restauración es un tema delicado. Hay que medir bien las decisiones y éstas son siempre discutibles. La tumba de Hery, por desgracia, tiene lagunas bastante grandes, lo que hace que visualmente se pierda la conexión entre las figuras de una misma escena. Para minimizar este problema, hemos decidido continuar las líneas horizontales que enmarcan los distintos registros y, así, ayudar al ojo del espectador a ver y comprender la escena completa. Como la decoración de la tumba de Hery es en relieve y las líneas de los marcos son incisas, decidimos que, en vez de pintarlas, trazaríamos las líneas de unión incisas sobre el mortero moderno. El resultado, hasta donde se puede apreciar hoy, es muy satisfactorio, la percepción de la pared gana mucho.

Djehuty hizo grabar en uno de los lados de la fachada de su tumba-capilla una gran inscripción biográfica en la que enumeran los monumentos que estaba construyendo la reina Hatshepsut en Tebas y en los que él participó de alguna manera. En la parte interna de su monumento funerario, en los extremos de la sala transversal, se grabaron otras dos grandes inscripciones. La de la derecha tiene los jeroglíficos pintados de rojo e incluye, además de menciones a los dioses y las ofrendas que deseaba recibir, referencias a su vida y carrera administrativa. La inscripción del extremo izquierdo tiene los jeroglíficos rellenos de pintura azul y el fondo de color rojo. El contenido del texto no lo tenemos todavía claro, pues se rompió en decenas de trozos, que ahora Lucía trata de juntar y recomponer. Aunque ha conseguido unir muchos, todavía quedan demasiadas lagunas. Aurora, está estos días fotografiando los fragmentos para tenerlos documentados con las uniones ya conseguidas.

Cisco excava en la galería que se abre desde la tumba de Hery y que conduce hacia “las capillas de los dioses”, según indican los graffiti demóticos. La galería sigue descendiendo y se ramifica, haciendo inasumible toda su excavación; así que Cisco tendrá que conformarse con una parte del camino. Como la galería atraviesa el pozo funerario de la tumba de Ay, ubicada a un nivel más alto en la colina, ha encontrado y sigue encontrando fragmentos de las estatuas de Ay y su familia en la galería subterránea. Su excavación es un caso muy elocuente de combinación entre arqueología y filología.